El nombre de esta entrada sería una mentira si yo lo pronunciara, por eso casi nunca lo hago, es más, muy pocas veces cuando canto la canción dueña de dicha frase, canto esa parte. ¿Por qué? Porque yo no conozco el amor. En realidad sí, pero no exactamente al amor que se refiere. Si se refiriera al amor que yo conozco, sabría, el que escribió la frase, que no son caros, que no te cuesta nada; que cuando amas a esas personas, no importa lo que cueste, no te quejas, solamente los amas, y das la vida por ellos. Como conozco (muy poco, pero lo necesario para entender la frase) al dueño de esta misma, comprendo, que habla del amor de parejas. No, ese amor no lo conozco. Sí, es verdad, en mis diecisiete años nunca me enamore, ni siquiera de mí misma. No, no pido que alguien me enseñe lo que es el amor, porque lo quiero conocer sola. Sí, tengo mucho miedo de enamorarme y sufrir, de conocer a esa persona por la cuál daría mi vida entera, por la cuál preferiría morir antes de perderla, y que un día sin darme cuenta, estemos separados de por vida, o aún peor, separados, los dos viviendo otras vidas. También reconozco que tengo miedo de nunca conocer a esa persona, de quedarme así por el resto de mi vida...
Odio como lo pintan al amor, no es tan así, y mucho menos como todos dicen que es. Seguramente debe ser lo mejor que puede pasarle a uno es su patética vida (porque convengamos que si no tenes amor es patética, te guste o no, yo ya lo acepté!), pero tampoco es para divinizarlo tanto. La verdad es que desconozco lo que es ese amor, pero supongo que se asemejará un poco al amor que uno comparte con la familia, o los amigos, por eso mismo no creo que sea cosa de otro mundo (mejor dejo de intentar consolarme).
A, otra cosa, lo importante no es que te amen, es amar... Entonces no estoy tan mal, yo amo, y sí que amo! (?)